Con la motivación de convertirse en una pequeña empresa, el proyecto Delavida, vinculado a la cosmetología artesanal, desde el municipio de Morón, en la provincia de Ciego de Ávila, se inserta en el mercado minorista local al comercializar, mediante ventas de garaje, diversas líneas de jabones naturales, destinados a la salud y belleza humana.
En la actualidad se expenden 17 variedades, con distintas formulaciones, formatos y precios, obtenidos a partir de recursos naturales (plantas medicinales, frutas, alimentos y otros con beneficios tópicos), mediante la técnica de saponificación en frío, que permite conservar los aditivos con total calidad, destacó Yunet Pérez Pérez, líder del proyecto.
Con durabilidad superior a los jabones industriales, tienen la bondad de conservar toda la glicerina natural, incorporan entre un siete y 10 por ciento de sobreengrasado, y el acondicionado lo mantienen en elevados estándares para evitar la resequedad y tirantez en la piel, precisó.
Delavida, un negocio que combina intereses económicos, sociales y medioambientales, también fabrica jabones artesanales naturales de la línea regalo-temático (destinados a todo tipo de celebraciones) y tiene proyecciones de incursionar en la creación de otros con fines decorativos y para la higiene del hogar.
A un mes de iniciado el expendio, se aprecia demanda y aceptación, sobre todo los productos de las líneas cosmética (exfoliantes, humectante-emoliente, antiarrugas, antimanchas, desintoxicantes y anticelulíticas) y medicinales-dermatológicos (para lesiones y enfermedades en la piel, relajación, infestaciones de ectoparásito y con aromas terapéuticos).
Las ventas de garaje se realizan los fines de semana en calle Segunda, número 27, entre Ocho y Nueve, en el Reparto Carrazana, de la ciudad de Morón, desde las 8:00 am hasta las 4:00 pm; y desarrollan la modalidad de servicio a domicilio, como respuesta a solicitudes realizadas por vía telefónica o las redes sociales.
Se prevé aportar una variedad de productos para la comercialización en la provincia avileña, incluido el destino turístico Jardines del Rey, considerando la novedad y aceptación de las formulaciones, la necesidad de incrementar el abastecimiento en la red de comercio interna, y la premisa de sustituir importaciones e insertarse en el mercado internacional.
De esta manera ―subrayó Pérez Pérez― se suplen necesidades terapéutico-dermatológicas, cosméticas y religiosas, se materializa la estrategia gubernamental para desarrollar la Medicina Natural y Tradicional y existirá la posibilidad de insertar nuevos productos en la red de farmacias especializadas en formulaciones naturales.
En consonancia con las tendencias mundiales orientadas al empleo de la cosmetología artesanal y la disminución de las agresiones a los ecosistemas, se apuesta al uso de tecnologías y recursos no contaminantes, y al reaprovechamiento de aceites vegetales desechados de las cocinas, en ocasiones vertidos al medio ambiente.
Los encadenamientos productivos con empresas y productores privados posibilitarán reducir las importaciones de recursos al adquirirlos en el territorio nacional y darle utilidad a las grasas animales desechadas en empresas cárnicas.
Mediante vínculos con minindustrias de la provincia, será posible aprovechar desperdicios de las producciones a base de mango, naranja, limón y aguacate, cuyas semillas son ricas en aceites con grandes propiedades.
La disponibilidad de 1.40 hectáreas de tierras en usufructo permite el cultivo de plantas, medicinales y de otras especies, empleadas para la extracción de aceites vegetales, lo que evita la búsqueda de materias primas en lugares distantes y el uso de productos industrializados.
Aunque se pretende que los jabones constituyan la línea fundamental, Delavida también desarrolla aceites y cremas anhidras, con el propósito de ampliar y diversificar sus productos para llegar a un mayor número de personas y cubrir necesidades del mercado.
La titular del proyecto enfatizó que Delavida es fruto del empeño de un equipo, al cual se integran otros tres trabajadores, dos de ellos licenciados en Economía y Ciencias Farmacéuticas; además del apoyo de familiares y amigos, todos con un rol decisivo en las gestión de recursos, las relaciones comerciales y la producción.
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