La CPA Paquito González adelanta la siembra de papa en la campaña actual, recién iniciada en la provincia
Rafael Santiesteban Pozo, presidente de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) en el país subrayó que la Asociación trabaja para que el sector cooperativo y campesino aproveche las potencialidades, haya mayor diversificación y perfeccione el sistema de contratación para que los precios se correspondan con el costo real de las producciones.
Abogó porque el margen de utilidad de las bases productivas sea el adecuado, que sirva de estímulo a los productores y, a la vez, proteja a la población y a las entidades de la economía.
En ese aspecto, dijo, «el campesinado cubano tiene conciencia y voluntad y apreciamos que, en los momentos actuales, con vistas al cierre del año y con las condiciones que se crean para las contrataciones del próximo, los mecanismos serán perfeccionados, en correspondencia con lo que necesita el pueblo y el país.
En cuanto a la comercialización explicó que alcanzan mayor madurez, con la incorporación de unas cuantas modificaciones que permite que un grupo de organismos y entidades puedan interactuar de forma directa con las cooperativas y los productores.
Todo ello redundará en que los alimentos lleguen al pueblo de la mejor manera, con precios más equilibrados como resultado de una correcta contratación, de ahí la responsabilidad de cada municipio en la definición de la demanda para los diferentes destinos, incluido el autoabastecimiento territorial.
El también miembro del Consejo de Estado elogió el trabajo de los más de 300 asociados a la CPA Paquito González, entre las mejores organizaciones de su tipo en el país, con sobrecumplimientos en los planes de siembra, de producción, la entrega de leche y las ventas al Estado, y un valor de producción mercantil superior a los 34 millones de pesos, con el empleo del 40 % del combustible planificado.
Santiesteban Pozo acotó que el principal reto de las 3 213 CPA y 2 399 CCS, que agrupan a casi 405 000 hombres y mujeres en todo el país, es llevar a la práctica los objetivos y acuerdos del XI Congreso de la ANAP y fomentar los programas de desarrollo de cada cooperativa, lograr la vinculación entre el campesino y la comunidad, aplicar la ciencia, la técnica y las tecnologías para obtener mejores resultados.